
El yogur es un ejemplo de alimento probiótico | Muyenforma.com
En nuestro aparato digestivo residen más de 400 tipos de microorganismos, unos benignos y otros patógenos, como, por ejemplo, la Escherichia coli y la Salmonella. Las bacterias beneficiosas que forman la flora actúan de manera similar a un escuadrón de policía, evitando que las patógenas, aquellas que causan enfermedades infecciosas, le ganen terreno y colonicen el organismo.
Los alimentos probióticos son microorganismos vivos que, tomados como suplemento alimenticio en las cantidades adecuadas, ejercen efectos positivos sobre la microbiota o flora intestinal. Se consideran una solución natural para recuperar el equilibrio intestinal y promover la salud digestiva.
Propiedades y usos de los probióticos
Entre la larga lista de beneficios de los probióticos se encuentra la mejora de las funciones intestinales y de la absorción de nutrientes. Los probióticos también estimulan la inmunidad, creando una barrera protectora contra las bacterias patógenas.
Según apuntan algunos estudios, los probióticos podrían ayudar a equilibrar los niveles de colesterol, a disminuir la presión arterial y a prevenir el cáncer de colon y la caries dental. Además, resultarían útiles para reducir las recurrencias de enfermedades inflamatorias intestinales, como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn.
Los probióticos han demostrado su eficacia en caso de estreñimiento, diarrea, flatulencia y otros problemas intestinales, así como cuando la flora intestinal se ve afectada por el estrés. Por otra parte, servirían para regenerar la microbiota tras la toma de antibióticos.
Ejemplos de alimentos probióticos
Es altamente recomendable incluir alimentos con probióticos en la dieta para garantizar el buen funcionamiento del sistema digestivo y fortalecer la salud en general.
Las bacterias probióticas están presentes en la siguiente lista de alimentos, tanto naturales como procesados:
- Productos lácteos fermentados (yogur, kéfir, quesos…)
- Chocolate negro
- Chucrut
- Miso
- Té kombucha
- Encurtidos de vegetales
- Tempeh
- Kimchi (plato típico coreano)
- Microalgas (chlorella, espirulina…)
- Pan de masa madre
Además, en farmacias y tiendas de alimentación natural y dietética se venden preparados probióticos en extracto líquido, en polvo y en forma de comprimidos o cápsulas.
Contraindicaciones
No hay efectos adversos asociados directamente a los probióticos o bacterias “amistosas”; se consideran seguros como suplementos nutricionales. Sin embargo, en algunas situaciones no resulta adecuado tomar probióticos.
¿Quiénes no deberían tomar probióticos? Los probióticos están contraindicados en personas que padecen SIDA, cáncer, lupus o tienen el sistema inmune debilitado. El uso de probióticos podría ser contraproducente en enfermos graves, ya que cuando la flora intestinal se destruye, los probióticos no tienen la capacidad de volver regenerarla. Resultan ineficaces cuando hay demasiada acidez estomacal, ya que las bacterias no la resisten y mueren antes de poder actuar.
Las personas intolerantes a los lácteos o alergia a algunos hongos pueden tener intolerancia también a los probióticos. Las mujeres embarazadas o aquellas que sospechen que pueden estarlo es importante que consulten al médico antes de tomar alimentos probióticos.
En Muy en forma | Alimentos probióticos y prebióticos: diferencias y ejemplos